martes, 12 de mayo de 2015

Quién diría III (poema).

Mis amigas cultura y tradición,
Las únicas que saben de mi traición;
Me lapidan por haberte totemisado,
Tras mi sedante eternizado.

Te me apareciste suave, inocente,
Frágil, de tiempo disidente;
Te imaginé, amé, siempre (joven),
Pura aún en el vaivén.

Calma y descanso perpetuo,
Armónico intercambio mutuo;
Madurabas lenta y sin exabruptos,
Serías, mi, intercambio de productos.

No puedo obrar en ti,
No eres “cambiable”, no osarían en ti;
Paseo por el centro de Lima
con los nuevos integrantes
de jupa.
así te conocí y te quise,
así has de existir aún si alguien te fatalice.

Cierto es que me rebelé a tu gobierno,
Escapé para sanar y recuperar;
Destruí tus imágenes y capillas,
Coroné tu ausencia, no sin tristezas.

Estás al tanto de mi osadía,
Has condenado mi fútil rebeldía;
Amnistía para mis captores,
Azuzas e intimidas a todos tus deudores.

Vas y vienes desde mi partida,
Agachas la cabeza y deseas sea mentira;
No aceptas tu escasez,
Prometes llevarme ante un juez.

Temí sobrevivir, pues sería yo sin ti,
Pálidamente existiría, existiría lejos y sin ti;
Olvidé que fuiste creación, simple canción,
Caminé, había dejado atrás mi ficción.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario