martes, 19 de octubre de 2021

poder (Poema).

Poder, 
fiebre sobrecogedora, 
que hace de los hombres, 
tiranos in crescendo. 

Vacuo placer 
que grotezcos carroñeros 
planean en derredor.

Poder, 
idilio de casquivanos,
locura de ilusos
y maldición de idealistas. 

Poder, 
podrido poder
nefasto e infeliz poder. 

sábado, 11 de septiembre de 2021

Para Abimael, para su arrepentimiento y enmienda. (Carta).

Supe de ti en la primaria, en mi escuelita fiscalizada 31739. Se decía que eras un justiciero. Que ibas de pueblo en pueblo castigando a los ricos y corruptos. Cada cosa que decían de ti y tus aliados me hacía recordar a Clint Eastwood (en la Trilogía del dólar) o a Tupac Amaru II. Te imaginaba como a William Wallace, en Corazón Valiente, luchando en minoría por la libertad de un pueblo oprimido y siendo derrotado por los poderosos que nos querían ver esclavos siempre.

Pero el 2001 (cuando estaba en sexto grado) al leer el periódico y ver la televisión (sólo captaba un canal), sólo se hablaba del atentado contra las torres gemelas. Me aterré al ver cómo las personas se aventaban de los edificios. No podía asimilar porqué una ideología deseaba la muerte a personas que no tenían más culpa que trabajar en dichos edificios. Ese 11 de setiembre me fui a dormir con miedo y no pude conciliar el sueño. Recordaba que dos o tres años atrás había escuchado hablar a mis padres sobre el terrorismo. Era de madrugada, mi papá le preguntó a mi mamá – ¿Qué haces si llegan los terroristas? –, mi mamá asustada le respondía – No pienses tonterías, ni digas eso, me da miedo – a lo que mi papá concluiría – nos escapamos puro río y llegamos a la estancia, en el campo no creo que nos encuentren –. Yo no entendía a quiénes se refería mi papá cuando decía terroristas, supuse que eran la gente del gobierno, porque tú o tu gente no podían ser, ya que en mi escuela los creían buenas personas. Y no podía dormir, ese día lloré porqué me daba miedo ver morir a gente inocente y no sabía qué era un terrorista y porqué existían personas que sacrificaban vidas inocentes.

            Al ingresar a la secundaria, palpando la pobreza de mis compañeros de carpeta, anhelaba un gobierno dirigido por ti o tus ideas (aunque ciertamente no conocía nada de tu programa). No podía entender cómo es que la distribución de la riqueza era tan desigual. Recuerdo que me pasaba horas escribiendo en mi cuaderno, planteaba formas de gobierno dictatorial que mejoraran la situación de pobreza de muchos compatriotas. Soñaba con tener un grupo guerrillero, que se enfrente al poder político y económico, renegué de la influencia religiosa dentro de las decisiones de gobierno. Con esa premisa colegial, ingresé a la universidad.

            En la Universidad encontré a estudiantes que utilizaban tus ideas o tus frases para ser populares o para alcanzar algún cargo en la dirigencia estudiantil. Había otros que te citaban para ganarse botellas de licor gratis o como táctica de seducción romántica. El primer año de universidad participé en cuanta protesta estudiantil hubiera, quería encontrar a personas más idealistas que yo, que practicaran tus ideas, pero sólo llegué a dar con fanáticos que mercantilizaban tu pensamiento. A la par, descubría a mártires como Rutilio Grande, Óscar Romero y Sandro Dordi. Y reafirmaba mis ideas de ofrecer mi vida, si fuese necesario, en la construcción de un cambio que use el amor y la fraternidad como únicas armas de destrucción. Entendí que estabas equivocado y que tu postura generó un desprecio masivo por nuestra tierra andina (los tuyos despreciaban la tradición andina y las fuerzas del estado creían que todo andino era uno de ustedes). Tu gente hablaba de colonialismo, de invasión occidental, de explotación y ustedes seguían ideas europeas y asiáticas, desmerecían la organización comunal, raptaban niños, pedían cuotas (como las bandas criminales en la actualidad). Fue a causa de la universidad que pude comprender que tú y tu grupo habían errado al plantear soluciones que no correspondían con nuestra realidad. Nunca fuimos China y tú no fuiste Mao.

            Comunidades campesinas, pueblos amazónicos y familias de dirigentes de asentamientos humanos citadinos, te ven con cólera y resentimiento. Tú y tu grupo marcaron a sangre y fuego su memoria. Por tu accionar ahora cada vez que nos organizamos para reclamar algo justo se nos tilda de potenciales terroristas. Pero aún tienes seguidores y es que este país sigue siendo miserable con sus ciudadanos. Aún creen algunos, que tus posturas son la única forma de encontrar equidad.

            Yo sólo quiero que, donde estés, hayas recapacitado e intercedas por los tuyos, para que cambien. Estoy orando para que tu accionar genere conciencia y nos sirva para entender que ninguna guerra fue buena jamás. Rezo para que se comprenda que la muerte no sana, no redime, no construye ni une. Esta pandemia nos ha demostrado que la muerte de unos no garantiza la salvación e otros y que si todos no nos cuidamos, podemos perecer.      

            Con dolor por las vidas inocentes que perecieron em tu insensatez, deseando que te hayas arrepentido y busques tu redención.

Fotografía de Lucanamarca,
El 03 de abril de 1983 fueron asesinadas 69
personas por el grupo terrorista Sendero Luminoso.


11 de setiembre del 2021,

a 20 años del ataque terrorista contra las torres gemelas de Nueva York;

 a 40 años del inicio del terrorismo en el Perú

viernes, 10 de septiembre de 2021

Volver a casa; la migración de la ciudad al campo ocasionada por el COVID 19.

 

Frente a una situación de crisis, las especies del reino animalia tienden a desesperarse inicialmente. Acto seguido, como si fuera un protocolo infalible, suelen migrar hacia áreas que consideren adecuadas para su supervivencia[1].

Tras la masificación de la enfermedad causada por el Coronavirus disease 2019[2], surgió el mismo intento migratorio en nuestra sociedad. Esta vez, era nuestra especie la que ejecutaba ese acto migratorio para salvarse del contagio. Además de huir para evitar la pandemia, se partía en busca de tierras productivas para asegurarse alimentos y no perecer de hambre por la inactividad económica de las ciudades.

Desde la primera semana de la cuarentena, dictaminada por el Gobierno en nuestro país, hay noticias diariamente de personas que tratan de retornan hacia el interior a bordo de camiones o caminando. Con equipaje diverso y toda la familia, las personas están abandonando las grandes ciudades. Muchas se van de la capital por miedo al contagio del virus, otras porque ya no les quedan recursos económicos para afrontar la crisis[3].

A diferencia de la migración hacia las grandes ciudades (para conseguir mejorar sus economías familiares, por educación, para acceder a servicios básicos carentes en sus pueblos de origen[4] o a consecuencia del Conflicto Armado Interno[5] que asoló nuestro país) sucedidas masivamente desde la segunda mitad del siglo pasado, esta tiene por destino el retorno de estas familias al pueblo que dejaron en busa de mejorar su calidad de vida.

            Ahora se marcha de regreso. No con aire triunfante (con algún reconocimiento bajo el brazo u orgullo de lo conseguido en la urbe). Se marcha con el pecho comprimido, con la angustia colgando de la manga de la ropa. Hay miedo de haber adquirido el virus, de la detención y retención por parte de la policía, de ser devueltos hacia la ciudad (hacia el hambre). También hay suspiros, esperanzas a ciegas, confianza de ser acogidos y cobijados por la familia, los compadres, los amigos, los paisanos. Nadie se hace a la idea que en su propio pueblo se les va a negar la entrada.

            Para muchas familias este motivo para desplazarse es nuevo. Varias de ellas, quizá ahora entiendan más y toleren a los migrantes de otras regiones. Hasta antes de la pandemia era común escuchar pronunciamientos sobre la necesidad de expulsar a los extranjeros pues quitaban espacio y recursos a los oriundos. Pocos conocían hasta ahora, las tragedias de los migrantes africanos[6], de oriente medio[7] y de varios países latinoamericanos[8].

Cuando esta pandemia se controle, tendremos una nueva distribución de las personas en territorios distintos. Probablemente la estadía en el terruño dure poco. Uno de los factores que harán volver, a las grandes ciudades y en especial a la capital, es el centralismo; sobre el cual el estado y la hegemonía económica controlan los destinos de la nación. Además, hay poco abastecimiento y especialización en el sector salud, la educación y los espacios de formación superior son limitados, las vías de comunicación y tecnología son precarias en la zona rural. En resumen: el interior del país sigue siendo el patio trasero de una casa.

            Habrá familias que decidan quedarse en sus pueblos, por miedo o por falta de recursos para empezar de nuevo en la capital. Otros con algún capital para invertir, verán en la producción de la tierra una buena alternativa para asegurarse buenas ganancias a corto y mediano plazo.

Para todos aquellos, que harán su vida en sus pueblos o nuevamente en la urbe. Hay tres problemas que se deben enfrentar y solucionar: Tierra, techo y trabajo[9].

TIERRA: La posesión de la tierra está priorizada para las grandes empresas. Muchos productores tienen que vender sus terrenos por la falta de tecnología para mejorar su producción, además de competir en un mercado desigual. Otros, monopolizan el control de la tierra y el agua, pocos lucran en desmedro de muchos.

TECHO: El grueso de la población no tiene techo propio. Muchos se consuelan con un cuarto rentado que les de la sensación de hogar. Y el centralismo hace que cada vez mas familias vivan acinadas en una ciudad ya colapsada. 

TRABAJO: la precariedad laboral ha golpeado duro en esta pandemia. Es diferente “guardarse” en casa; teniendo un trabajo estable o una pensión adecuada, que evite cualquier escasez. En contraste, asentamientos humanos que viven de negocios informales o personas que venden su mano de obra, no calificada, sin ningún beneficio laboral.

            Por ello muchas familias retornan a su tierra. Ahora se migra, con la esperanza de producir nuevamente la tierra, para generar autoempleo, que haga volver a la calma y la alegría de vivir comunitariamente, prosperar y mejor la vida de las generaciones venideras.


Los retornantes. Fuente (IDL).
Los retornantes: ¿por qué existe un éxodo de migrantes internos hacia las regiones?


13 de abril del 2020.

Veintinueveavo día de cuarentena.

Marcapomacocha. Comunidad Campesina de Marcapomacocha, paraje Cullic.

 

Post Scriptum: En Marcapomacocha y Carhuacayán (distritos de la provincia de Yauli en la región Junín), además de la recepción de retornados se realizó envíos de remesas y víveres a los familiares de estos distritos que residían en otras ciudades (principalmente Lima y Huancayo). Así se potencializó al campo y la zona rural como el eje de subsistencia y desarrollo económico interregional. Esta actividad fue desarrollada por varios distritos del ande peruano durante el confinamiento social del 2020.






[1] Sobre la Teoría migratoria ver:

                    2011          Gutiérrez Guerra Ivis.

El debate científico sobre Migración Internacional y Desarrollo.

http://biblioteca.clacso.edu.ar/Cuba/cemi-uh/20110720124104/CLACSOIVIS.pdf

                    2005          Tornos Cubillo Andrés.

Humanismos y teorías de las migraciones. Curso de Teología, Universidad de Cantabria.

https://web.unican.es/campuscultural/Documents/Aula%20de%20estudios%20sobre%20religi%C3%B3n/2005-2006/CursoTeologiaHumanismosYteorias2005-2006.pdf

                    1997          Los peruanos que vienen: quiénes son y cómo entienden típicamente la inmigración los                                          inmigrantes peruanos.

Jesús Labrador Fernández, Miguel García-Baró López, Héctor Muñoz; Andrés Tornos (coord.), Rosa Aparicio Gómez (coord.)

                    1993          Douglas S. Massey, Joaquín Arango, Graeme Hugo, Ali Kouaouci, Adela Pellegrino, J.                                 Edward Taylor.

Teorías de Migración Internacional: Una revisión y aproximación.

En: Population and Development Review, Vol.19, n 3, Sep.

http://www.derechoshumanos.unlp.edu.ar/assets/files/documentos/teorias-de-migracion-internacional-una-revision-y-aproximacion.pdf

[2] Ver en la Organización Mundial de la Salud: https://www.who.int/es/emergencies/diseases/novel-coronavirus-2019

[3] Para leer algunas crónicas sobre los retornados, ver:

The New York time. En Perú el virus provoca que miles de personas regresen al campo.

Rosa Chávez Yacila y Julie Turkewitz. 30 de abril de 2020.

https://www.nytimes.com/es/2020/04/30/espanol/america-latina/peru-virus-migracion-caminantes.html

Defensoría del pueblo. Migración interna y varados durante la pandemia. Serie Informes Especiales Nº 23-2020-DP.

Alicia Abanto Cabanillas, Matilde Cobeña Vásquez, Percy Castillo Torres, Nelly Aedo Rueda, Malena Pineda Ángeles, Alberto Huerta Zapata, Gloria Montoya de la Iglesia, Jéssica Rodriguez Rime, Patricia Tipian Mori y

Giancarlos Quiroz Narvaez.

https://www.defensoria.gob.pe/wp-content/uploads/2020/07/Informe-Especial-N%C2%BA-23-2020-DP.pdf

Ojo público. La dura travesía de los más pobres: Pandemia y desempleo expulsan a miles de migrantes. 26 Abril, 2020.

Por: Ralph Zapata (Piura), Geraldine Santos (Huánuco), Magali Estrada (Áncash), Alicia Tovar (Lambayeque), Yanua Atamaín (San Martín), Karin Chacón (Puno), Jorge Carrillo (Loreto), Claudia Chávez (La Libertad), Gustavo Callapiña (Arequipa) y Clarys Cárdenas (Cusco).

https://ojo-publico.com/1786/desplazados-por-la-pandemia-la-travesia-de-los-mas-pobres

[4]                  Ernesto Hector Maguiña Salinas

Esbozo de las migraciones internas en el siglo xx y primera década del siglo xxi y su relación con los modelos de desarrollo económico en el Perú. 2016

file:///C:/Users/DELL/Downloads/Dialnet-EsbozoDeLasMigracionesInternasEnElSigloXXYPrimeraD-6171133%20.pdf

[5]                 Escárzaga, Fabiola; Abanto Llaque, Julio; Chamorro G., Anderson.

                   Migración, guerra interna e identidad andina en Perú

                   Política y Cultura, núm. 18, otoño, 2002, pp. 278-298 Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco

                   Distrito Federal, México.

                   https://www.redalyc.org/pdf/267/26701813.pdf

[6] Ver informe de la ONU https://news.un.org/es/story/2020/02/1469661

                     Alicia G. Rodríguez-Marín

                    El negocio de las redes migratorias en el norte de África.

El Orden Mundial. 12 de enero del 2020.

https://elordenmundial.com/negocio-redes-migratorias-norte-africa/

[7] Ver en Yulianela Pérez García. Medio Oriente: Migraciones económicas y conflictos. 2011.

                    http://biblioteca.clacso.edu.ar/Cuba/cemi-uh/20120614111840/CEID_YULIANELA_PEREZ_GARCIA.pdf

[8] Blogger: Telesurtv.net. Por: Pablo Jofré Leal

                    La migración centroamericana: Causas y desafíos.

                    https://www.telesurtv.net/bloggers/La-migracion-centroamericana-Causas-y-desafios-20200413-0001.html

[9] Me baso en el Discurso pronunciado por el Papa Francisco durante el II Encuentro Mundial de Movimientos      Sociales y Populares realizado en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. Expo Feria, Santa Cruz de la Sierra  (Bolivia) Jueves 9 de julio de 2015

https://www.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2015/july/documents/papa-francesco_20150709_bolivia-movimenti-popolari.pdf

lunes, 9 de agosto de 2021

Enésima (Poema).

Me voy
a escribir ilusiones 
frente de tu casa. 
No te buscaré, 
me contenta saber que estás allí, 
con él. 

Y si no estás allí dentro, 
será que saliste 
a florecer en otro jardín. 

Y seguiré sentado en frente, 
viendo tu ausencia 
dentro de tu casa 
y sintiéndola dentro 
de mi agujereado corazón.

domingo, 25 de julio de 2021

La verdadera felicidad (poema).

Ayúdanos a pintar la vida,
A cambiarle su rutina. 
Vamos a decorar la seriedad,
Borrar la escala de grises y
Decorarla con tonos imaginarios.

Vamos a reír, a correr y jugar
Vayamos a chapotear en los charcos,
A tirar piedras en la laguna.
Aventémonos en la nieve,
En la hierba o en la arena.

Sigamos siendo niños
Y vivamos inocentes,
Columpiándonos 
Y pintándonos la cara
Con mezclas sin censura.

Tomémonos de la mano
Y cantemos a todo dar
Que este mundo es de los niños
Y nadie nos va arrebatar. 

miércoles, 28 de abril de 2021

Hacia el horizonte (Poema).

Aún de tarde hay memoria, 
no espanto sino un abrazo de añoranza. 
Sonrojados los pómulos 
por el cariño invasivo del sol, 
que pasa confiado por las grietas 
de una diáfana humanidad. 

 A lo lejos se oyen voces 
de seres intentando la vida, 
obstaculizados por sus propios inventos, 
amenazados por sus propios olvidos. 

De pronto aparece el silencio 
y ya no se percibe que el oxígeno disminuya; 
¿será que allá, los seres convinieron amarse? 
O ¿será que se diluyeron 
enfrentados por trozos de piedras brillantes?