Nos fuimos, nos perdimos,
desaparecimos tras la noche;
nos fundimos,
tropecé y desprendí tu broche.
Antes de tu llegada,
te pensaba perfecta;
ahora tú en mi morada,
te siento mi adepta.
Te veía flotar sobre las aguas,
lucías soberana de amores;
llueve aquí y a leguas,
tu invento y mis temores.
La realidad te conocía plástica,
más yo te imaginaba fantástica;
la oscuridad comulgó tu disfraz,
me obligas a un silencio mordaz.
Tengo una querella,
vale mas que toda ella;
jamás fue doncella,
siempre fue solo ella.
La noche me confundió,
la lujuria nos invadió;
solos nos perdimos,
solos nos despedimos.
Tú cumplías con una travesura,
común en tu desventura;
yo creía en tu deidad,
sin saber la cruel fatalidad.
No fui ni primero ni único,
fueron estampas las de tu cortejo;
mi ser difuso y lacónico,
evocan los sucesos de ese tu festejo.
desaparecimos tras la noche;
nos fundimos,
tropecé y desprendí tu broche.
Antes de tu llegada,
te pensaba perfecta;
ahora tú en mi morada,
te siento mi adepta.
Te veía flotar sobre las aguas,
lucías soberana de amores;
llueve aquí y a leguas,
tu invento y mis temores.
La realidad te conocía plástica,
más yo te imaginaba fantástica;
la oscuridad comulgó tu disfraz,
me obligas a un silencio mordaz.
vale mas que toda ella;
jamás fue doncella,
siempre fue solo ella.
La noche me confundió,
la lujuria nos invadió;
solos nos perdimos,
solos nos despedimos.
Tú cumplías con una travesura,
común en tu desventura;
yo creía en tu deidad,
sin saber la cruel fatalidad.
No fui ni primero ni único,
fueron estampas las de tu cortejo;
mi ser difuso y lacónico,
evocan los sucesos de ese tu festejo.